martes, 15 de enero de 2008

HOLA A CASI TODOS


LA DOBLE MORAL DE LOS DOCENTES
Las intimidades de una docente en un documento apasionante.
La Ética es esa cosa que los otros no tienen. Es como la Justicia: sólo se nota cuando falta, o cuando nos perjudica.Algunos pretenden que está ahí nomás, que viene con el equipo que traemos de fábrica y sólo hay que estirar la mano para tenerla. Tal sería el caso del derecho a la vida, o mejor dicho, del deber de no tomar vida ajena. Un tema más espinoso que viene de la mano del anterior, es precisar el principio de la vida. Y otro asunto un poco menor sería definir las ganas de vivir.Otros creen que la Ética es relativa. Se construye a cada momento, en cada lugar, a través de los tiempos. Podemos convenir en tres o cuatro principios básicos de convivencia. Pero este acuerdo es una construcción utilitaria para impedir que nos matemos, pero sólo entre nosotros. Con los la comarca de más allá las reglas son otras (podemos matarlos por algunos motivos), y ellos a su vez tienen sus acuerdos y sus motivos. Este relativismo ético puede traernos sorpresas desagradables, pero ello no es privativo de esta manera de pensar. La contraria también tiene lo suyo por alguno de los temas asociados expuestos más arriba.La Ética tiene consecuencias inevitables. Por ejemplo los dilemas éticos. Un dilema ético ocurre cuando haga lo que haga, violo algún principio ético, y debo elegir cuidadosamente cuál será. Si estoy quebrado y sin trabajo ¿Le arrebato la cartera a la viejita, o dejo que mi hijo no cene otra vez? Esta respuesta es fácil.¿Torturo a mi prisionero o dejo que explote la bomba en algún lugar? Esta es peor.Lo que realmente nos interesa discutir aquí es que una misma persona puede esgrimir impunemente éticas dobles (o triples, o vaya uno a saber cuántas posibilidades más nos ofrece esta vida).
Por ejemplo, la Seño (Rita) se pliega a la huelga del sindicato en la escuela estatal de la mañana pero concurre religiosamente a la privada del turno tarde. (Otras veces, pide licencia por enfermedad el día del paro). Su conducta es absolutamente legal, pero… ¿es ética?En la estatal hace rato que los actos patrios se hacen en día hábil anterior. Pero la Seño no protesta si en la privada la citan un sábado a las dos de la tarde para discutir el viaje de egresados de los chicos. (Y sin salario, por supuesto). Los mercaderes no tienen ética (en realidad tiene otra distinta), pero ¿y la Seño (Rita)?La Seño ha despotricado contra la Reforma en la estatal delante de quien quisiera oírla.(Y ya se queja de la Ley por venir) Pero admite en silencio directivas impresentables de la boca de algún directivo de nuestras privadas. Los criterios de evaluación de la Seño, ¿son los mismos en la High School of Calamuchita que en el polimodal del segundo cinturón del conurbano? ¿Y la preparación de sus clases?¿Por qué hace en la estatal cosas que ni se atreve a pensar en la privada?Es una cuestión de poder. Ustedes tienen razón. La Seño (Rita) hace lo que puede y no tengo derecho a pedir conductas heroicas a nadie.Pero debo confesar que esta doble vida me tiene los nervios a la miseria.Y tengo para mi que algo debe estar muy mal en alguna parte para que todo lo nuestro, que es más estatal que privado, nos importe un carajo, con perdón de la palabra.